Con humor, propone poner en valor el asumir y activar la vitalidad como forma de vida, en la hora de la vejez. REFLEXIONAR y darle voz, a través del teatro a un colectivo olvidado “LA TERCERA EDAD”, confrontando temas “muerte & vida”, “fantasía & realidad”, actitud vital para enfrentarse con ironía al tema fundamental de “EL SUEÑO Y LA VIGILIA”